En Colombia el proceso de Rendición de Cuentas ya cuenta con una gran dimensión significativa a todo nivel, especialmente en aquellos escenarios de diálogo y encuentro entre los ciudadanos y el Estado. En el marco de la conmemoración del séptimo aniversario de expedición del Conpes 3654 del 12 de abril de 2010, celebramos la instrumentalización a través de herramientas normativas como leyes de gran fuerza y cobertura y de una infraestructura administrativa que ha permitido hacer seguimientos a este importante proceso resaltando el posicionamiento de la política de Rendición de Cuentas en la agenda pública nacional.

Es así como en Colombia se ha fortalecido la Política de Rendición de Cuentas de la Rama Ejecutiva a los Ciudadanos mediante el fortalecimiento de los mecanismos de transparencia, participación ciudadana y control social a través de leyes estatutarias por las cuales se dictan disposiciones en materia de promoción y protección del derecho a la participación democrática, la transparencia y el acceso a la información y la lucha contra la corrupción. A partir de la transformación conceptual, metodológica y de política que significó el Conpes 3654 de 2010, la Rendición de Cuentas es una de las formas más efectivas de evaluar y controlar con la ciudadanía los proyectos de intervención de responsabilidad del estado.

Un ejemplo de materialización concreta de uno de los objetivos primordiales del Conpes, “consolidar la Rendición de Cuentas como un proceso permanente de la rama ejecutiva a la ciudadanía”, se aprecia en las disposiciones de la Ley 1757 de 2015, al expresar:

“Artículo 48. Definición rendición de cuentas. Por rendición de cuentas se entiende el proceso conformado por un conjunto de normas, procedimientos, metodologías, estructuras, prácticas y resultados mediante los cuales, las entidades de la administración pública del nivel nacional y territorial y los servidores públicos informan, explican y dan a conocer los resultados de su gestión a los ciudadanos, la sociedad civil, otras entidades públicas y a los organismos de control, a partir de la promoción del diálogo.

"Artículo 49. Principios y elementos del proceso de Rendición de Cuentas. Los principios básicos que rigen la rendición de cuentas de las entidades públicas nacionales y territoriales, proceso que se constituye en una actitud permanente del servidor público, son: continuidad y permanencia, apertura y transparencia, y amplia difusión y visibilidad. Así mismo, se fundamenta en los elementos de información, lenguaje comprensible al ciudadano, diálogo e incentivos”.

En este panorama y, con el fin de fortalecer la Rendición de Cuentas, se eleva su concepción a una actitud permanente, es decir, no es sólo una obligación de las entidades públicas, es un principio en el ejercicio de las funciones y responsabilidades que cada servidor público de las entidades públicas del país.

Se considera que el diagnóstico realizado hace siete años, focalizado en que en Colombia la información era inadecuada para los fines de la rendición de cuentas, en tanto existía una baja calidad con relación a los canales y el lenguaje utilizado para que los ciudadanos se informaran vía al diálogo con la administración pública, y que había limitados incentivos para consolidación de la cultura de la Rendición de Cuentas, la realidad ha sido intervenida eficazmente mediante el fortalecimiento de mecanismos legales y administrativos que cualifican, hoy en día, este ejercicio democrático a través de varios actores como lo son la Función Pública, la Secretaria de Transparencia de la Presidencia de la República, el Departamental Nacional de Planeación, entre otros; pero, principalmente, gracias a la ciudadanía, que día a día genera nuevas y mejores dinámicas de participación con una incidencia cada vez mayor en la toma de decisiones al interior de la gestión de lo público.

En esta línea de intervención, el Gobierno Nacional, a través del Departamento Administrativo de la Función Pública como líder de la política de Rendición de Cuentas en el país, puntualmente asesora a cada entidad con herramientas y metodologías para fortalecer la planeación, ejecución y los seguimientos en la incorporación de las estrategias de Rendición de Cuentas al interior de los planes anticorrupción y de atención al ciudadano de cada vigencia, con el fin de mejorar los atributos de la información que se entrega a los ciudadanos, fomentar el diálogo y generar incentivos para que las entidades públicas rindan cuentas y se consolide la cultura de la Rendición de Cuentas en el país.

Por otra parte, Función Pública también generó la categoría de rendición de cuentas en el banco de éxitos y el Premio de Alta Gerencia de la administración pública e incluyó, a través del MECI, indicadores de seguimiento.

Finalmente se ha promovido una estrategia de capacitación a la ciudadanía para la petición de cuentas y el ejercicio del control social a través de la Red Institucional de Apoyo a las Veedurías Ciudadanas en el marco de la Ley 850 de 2003 y el Plan Nacional de Formación para el Control Social.

Como evidencia de los resultados, actualmente el indicador de Rendición de Cuentas de la Encuesta de Ambiente y Desempeño Institucional desarrollada por el DANE ubica, para el nivel nacional, un grado de avance del 84,4%. De igual forma, Función Pública a través del Formulario Único de Reporte de Avances en la Gestión, FURAG, como instrumento de medición del Modelo Integrado de Planeación y Gestión, identifica el nivel de avance en la implementación de la política de Rendición de Cuentas en un 80.6% en la rama ejecutiva del nivel nacional. Los datos muestran un avance año a año, sin embargo, hoy que se celebra el aniversario del Conpes 3654 de 2010, el reto de fortalecer el tema en el país permanece a través del compromiso fundamental de la Función Pública y todo el Estado colombiano con la transparencia, la participación ciudadana y la lucha contra la corrupción.